Me gustaría saber, a la luz del debate presente, qué es lo que haremos de manera no solo escrita, sino práctica, respecto al tema de los mapuches ¿Es suficiente con escribir que estamos molestos con el tema? ¿Acaso una postura crítica no exige a la vez compromiso real? Y con ello me refiero a que no basta con que comentemos el tema, o que planteemos en palabras “que están mal las cosas”, sino en realizar como Universidad una actividad social que dé cuenta del problema mapuche. Que se manifieste en concreto y directamente su crítica política, y no sólo cultural-académica, en cómo se han llevado a cabo las negociaciones. Dentro de este punto, mi postura si bien está con los mapuches, a la vez, creo, se trata de asistir a una especie de “concientización” de lo mapuche, y que tenga que ver de una vez por todas con esta deuda que tenemos con ellos. Ellos son “presente” y no un simple pasado utópico de lo que “era” ser mapuche, sino de lo que son hoy en día y enfrentan.
Hoy en día, existe la necesidad (legal) en el Gobierno de “identificar” a los encapuchados, sujetos “oscuros”, “tránsfugos”, que legitiman su oposición al capitalismo y al Estado a través de manifestaciones violentas. Pero bien, creo que se hace necesario “hoy” desenmascarar al propio gobierno y sus políticas de Terror y violencia, para quienes luchan por una causa justa. Y de eso se trata en el fondo la causa mapuche, porque es una causa justificada por la historia y por tanto histórica, frente a un gobierno que enmascarado en sus leyes, no les reconoce algo que fue previo a esta constitución moderna: “su derecho legitimo a la autonomía territorial y cultural que ellos tienen”. Por ello, nunca fue tan dictatorial esta cuestión de lo mapuche, desde la “gobernabilidad”, y el tema mapuche se ha transformado en algo mass-mediático lamentable, porque siempre aparecen como los inconstitucionales. Hoy día, por ejemplo, el poder judicial dijo que no se sentarían en una mesa de diálogo, porque sería in-constitucional. Y yo me pregunto ¿La constitución es extra-terrestre? ¿Es acaso sagrada? ¿No es acaso una construcción social y por ello algo que se puede de-construir, transformar, re-pensar desde el ahora?
Al final, las amarras y limitaciones que el gobierno encuentra en sus justificaciones son in- humanas, porque pasan a llevar el “derecho a pueblo legítimo” que tienen los mapuches como cultura y pueblo histórico en este país inventado, que reclama algo que aún se les debe hoy, que es su derecho a “constituirse e institucionalizarse como pueblo con una “culturalidad” distinta.
Edgardo La Rosa
¿Necesariamente el problema mapuche debe institucionalizarse? Segun entiendo, el problema más importante que se desarrolla en el territorio tiene que ver con las reducciones que el Estado Nacional chileno ha ejercido sobre aquel lugar. Lugar de profundas significaciones tradicionales para el pueblo Mapuche que permiten su existencia. No será que el debate debería extenderse a los fundamentos que constituyen el Estado Nacional unitario y centralizado chileno. No será acaso que los mismos que gobiernan el país son los dueños de ese territorio arrebatado ¿por que institucionalizarse entonces? ¿ha existido alguna discusion sobre estados pluri-étnicos? ¿recuerdan la forma Republica de españoles- Republica de indios?Creo que son muchas las aristan que componen este problema, el cual ha sido nutrido cada vez más por el tiempo historico que no se detiene y que fabrica cada vez más obstaculos.Pero enfatizar el problema mapuche sobre la ley antiterrorista heredada de la dictadura de Pinochet, seria reducir el conflicto a los ultimos 40 años. Por el contrario, la huelga es el sintoma concreto de algo con mayores profundidades simplificando la problematica, veo que el problema fundamental radica en la propiedad capitalista de la tierra, sin embargo, si no hay disposicion de cambiar la propiedad privada, pareciera que todo se entretejiera en un problema judicial ¿que se puede hacer si el Estado fortalece el mercado, solucionando el problema metiendo a la cárcel a los que se oponen a una forma de vida altenativa?
ResponderEliminarMiguel G.R.
Muy buena crítica edgardo, creo que tu artículo da signos por donde se debe buscar y caminar, como también el aporte del miguel, sobre todo que en este tema que se desprenden muchos matices que hay que abordar y debatir.
ResponderEliminarMe quedo con el tema de quien construye la constitución y quienes la legitiman, ya que de esa forma se puede abrir una respuesta a la última pregunta que se formula el Miguel. En esa calidad creo que debemos preguntarnos como aportar al cambio de mentalidad que instaura el mercado de manos de los sectores dominates que tan tercamente no dan su brazo a torce.
Pero además, como nosotros nos pensamos, desde una pasividad que poca veces nos permite interpelarnos, entorno a nuestro verdadero compromiso con los movimientos sociales.
Que podemos decir al respecto,
solo escribir ,
enojarnos, marchar de vez en cuando
o simplemente discutir en la esfera privada.
Me parece que también debemos mirarnos, como legitimadores de sistemas constitucionales al silenciar o simplemente seguir desde la pasividad, sin construir nada, desde abajo, puesto que no creo que las carceles contengan siempre, ha aquellos q piensan en otras alternativas de vida.
felipe T....